Aquel primer campeón. Este primer campeón

La historia se repite. 72 años después del primer torneo oficial de la Liga Pehuajense, campeón y sub campeón se repiten, en esta primera “Copa de Campeones”. Calaveras y Atlético Mones Cazón, como en 1945 volvieron a escribir su nombre. Y como sucedió en esa oportunidad, el orden fue el mismo. Calaveras campeón, y el león, en el segundo lugar.

Seguramente, la Copa de Campeones debe haber sido tomada por la mayoría como preparación, pero con el correr de las fechas, ganarla era un propósito válido. Con un significativo que suplió a los viejos torneos preparación, y una buena impronta, tener la presencia de los ganadores del torneo vernáculo. Seguramente, con cuestiones por corregir, la Copa de Campeones ha venido para quedarse. En su primera edición el equipo de la “V” en el pecho, como había sucedido en 1945, fue el adelantado en escribir su nombre en letras doradas.

En los albores de nuestro fútbol, Calaveras y Atlético fueron los animadores del torneo que contó con ocho equipos. El de Pehuajó sumó 20 unidades, y el de Mones Cazón su escolta con 17. Como en la tarde domingo 23 de abril, hace más de siete décadas, estos dos equipos no se sacaron ventaja, e igualaron los dos compromisos. Fue 1 a 1, y 0 a 0.

El destino los volvió a encontrar en otro inicio de certámenes por estas latitudes. La Copa de Campeones los tuvo como protagonistas, y ante un importante marco de público, esta vez mano a mano definieron el título. Fue igualdad, y luego Calaveras se impuso desde la definición del punto penal, para hacerle un guiño a la historia, y levantar, una nueva primera copa.