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Carrica pone la pausa en un mundo acelerado



Juan Luis Carrica, defensor y capitán de KDT campeón, fue elegido mejor jugador de la temporada de 2017 de la Liga Pehuajense de Fútbol, luego de una votación entre jugadores y técnicos que componen el torneo. En el 2012 también fue el más votado.

Por Álvaro Michelli
[Nota publicada en el anuario XVI de la Revista JUGAR]


Recibe la noticia y le abre las puertas de su casa a JUGAR. Calienta el agua en una pava, se muestra atento y tranquilo. Familiero, juega con su hijo Rufino y su hija Ignacia. Prepara el mate y se dispone a charlar.

¿Cuál es el sentimiento de que te hayan elegido mejor jugador de la temporada?
Es muy lindo que te reconozcan, estoy agradecido a mis colegas y a los técnicos que votaron.

¿Por qué crees que te votaron?
Sinceramente no lo sé, me sentí muy bien durante el año y se habrá visto reflejado. Pero también es merito de mis compañeros que me facilitan mucho las cosas. Somos un equipo muy unido, donde cada uno se brinda al cien por el compañero.

¿Cómo fue el año de KDT?
En el campeonato fuimos de menor a mayor. Durante la parte clasificatoria fuimos medio irregulares, tuvimos pasajes que jugamos bien y otros mal. Pero en la mitad enderezamos el carro y nos alcanzó para clasificar. Una vez que entramos al petit también arrancamos a los tumbos, pero cuando el equipo vio que no le quedaban más vidas ahí apareció y tomó confianza y terminó donde terminó.

¿Cómo se trabajan esas irregularidades?
Nos dábamos cuenta de que el material estaba, que las condiciones las teníamos y que solamente teníamos que plasmarlo en la cancha. Éramos nuestro propio enemigo. Si estábamos metidos el partido se nos hacía favorable, y si estábamos en cualquier cosa iba a ser mucho más difícil.

¿Cuál es tu tarea como capitán del equipo?

Soy el capitán del equipo y es un orgullo enorme, pero soy uno más de los once que entran a la cancha. Me tengo que dedicar a hacer mi trabajo que es defender, tener a mis compañeros atentos y estar ordenados.

Tuviste a Diego Funes como compañero y ahora es el técnico, ¿cómo es en este nuevo rol?

Cuando asumió sabía que íbamos a tener un gran técnico, porque Diego vive las 24 horas pensando en fútbol, le gusta y lo siente como lo siento yo.

¿Y cuál es la idea de juego que tiene?
Un equipo que piensa en el arco contrario todo el tiempo, en atacar y jugar bien a la pelota. Es un tipo que no deja ningún detalle librado al azar, entras a la cancha y ya sabes como juega el rival y lo que va a hacer.

¿Cuándo se sintieron campeones?
Cuando Emma Olatte mete el cabezazo. El último partido fue increíble, metemos el gol y nos empatan, el segundo y lo mismo. Ahí me preguntaba qué hay que hacer para ganar y por suerte apareció el Pelado sobre el final. Maderense es un equipo duro que para ganarle lo tenes que matar.

¿En quién pensaste en ese momento?
En la familia, que anda atrás tuyo todo el año y se va amoldando a uno. También en mis compañeros, que ves el esfuerzo que hacen en el día a día.

Durante el campeonato sufriste una lesión y recurrieron a un manosanta, ¿puede ser?
Es complicado, generalmente no me lesiono mucho. Uno de mis compañeros se me había caído encima y me lesioné uno de los dedos del pie, por lo que falté a tres o cuatro partidos. Caminaba por las paredes ya no sabía que hacer, pero por suerte tuvimos la ayuda de un pai espiritual. No quería saber nada con esas cosas y fui, es creer o reventar. Me lo dijo Diego Funes como última alternativa.

¿Como es Juan Luis Carrica como jugador?
Un tipo tranquilo, pensante y autoexigente. Es complicado hablar de uno, no es fácil.

Responde pensando en cada palabra, las elige, se toma su tiempo. Tiempista, como lo es en la zaga cuando defiende los colores de KDT. Cuando todos aceleran, Juan piensa y pone la pausa. Quizás eso lo convierte en diferente.