Matías Tolosa: "Mi idea es retirarme con la camiseta de Calaveras"

Matías Tolosa dio su pensar del presente que nos atraviesa e hizo un recorrido por su carrera, desde sus primeros pasos en el fútbol hasta sus juegos iniciales en el 2020. Un año donde el volante ofensivo había defendido los colores de Progreso de Juan José Paso, su quinto elenco en la Liga Pehuajense de Fútbol: Atlético Calaveras, Atlético General San Martín, Defensores del Este y Maderense, los anteriores.

-¿Cómo vez este presente?
-Cada vez más complicado, rogando que no llegue ningún caso a Pehuajó.

-Hay casos en Henderson y Bolívar, entre otros partidos cercanos, ¿Cómo vez Pehuajó en estos momentos?
-Creo que es el momento en el que tenemos que hacer las cosas de la mejor manera, ser muy estrictos en los controles de entrada a la ciudad y después cuidarnos lo mas posibles entre nosotros.

-¿Extrañas algo de tu vieja rutina?
-En lo personal, lo que más extraño es el fútbol, que es lo único que hoy en día me falta. Gracias a Dios me pude reencontrar con la familia, que es lo más importante, compartir un asado, tomar un mate, que es lo que hacia siempre.

-¿Un picado en familia, entre primos, hermanos y demás allegados?
-Jajaja, seria lindo. Gracias a Dios tengo muchos primos y amigos para jugar un picadito. Pero por ahora queda para más adelante.

-Te toca organizar un partido ¿Cómo serían los dos equipos?
-Si es un picadito, nos encontramos todos, desparramamos y listo, esos son para pasarla bien y divertirnos. Por los puntos es otra cosa, jajaja.

-¿Cuánto significa una pelota en tu familia?
-Muchísimo. Vengo de una familia muy futbolera, donde todos juegan o han jugado. En toda juntada familiar, el tema central siempre es el fútbol.

-¿Y Boca, que rol juega?
-Todo el rol que te imagines, jajaja. Amamos a Boca, estamos medios locos. Pero poder ir a la cancha con mi viejo, mi hermano y mi hijo es impagable; me falta llevar a las nenas, que también son fanáticas, pero la madre se pone firme y aun no las deja, pero ya las voy a llevar, jajaja.

-¿Extrañas tu parte de jugador, que hoy esta pausada?
-Si, mucho. Yo siempre digo que es un estilo de vida y sinceramente, se extraña bastante, aunque mientras esperamos que pase todo. También se disfrutan otras cosas, se disfruta la familia, que hacen el sacrificio cuando me voy a entrenar o jugar los domingos.

-A nivel liguista dieron la afirmación de que no iba haber fútbol este año. Pero los avances, si se puede decir así, entorno al COVID y los pasajes de fases, ¿Hace pensar que puede volver la actividad en este 2020?
-Yo creo que no, va a ser muy difícil. Ojalá siga todo así y se pueda jugar algún torneo más reducido, como para no perder el año, porque es mucho estar un año parados. Todo depende de como evolucione todo, pero ojalá podamos volver lo antes posible.

-¿Cómo es tu futuro futbolístico, vas a continuar en Progreso en el próximo año o todavía es incierto?
-Seguramente si, he hablado con los chicos de Paso y la idea es continuar con el proyecto, así que te diría que seguramente si.

-¿Cómo va a ser volver a los entrenamiento, después de este largo párate?
-Creo que va a ser muy lindo, volver a entrenar con compañeros, aunque este año entrenara solo. Pero el volver a hacer una práctica de fútbol va a ser muy lindo, creo que todos estamos esperando ansiosos, por volver a patear la pelota.

-¿Complicado entrenar en el hogar? Pese que ahora dejan salir un poco.
-Muy complicado, se hace muy difícil. Aparte estoy casi todo el día en el trabajo, tengo poco tiempo para almorzar y después volver a trabajar; cuando salgo a la noche, ya no se puede salir a correr, así que es complicado.

-¿Qué pensas de esos jugadores que por ahí se mentalizaban en jugar su último año?
-Eso va en la mentalidad y las ganas de cada uno. A algunos por ahí los empuja a ya colgar los botines y a otros, como el caso de (José) Moretti, que he hablado con él y le han dado más ganas de jugar, cuando a principio de año ya no tenia tantas ganas.

-¿Cómo habías iniciado vos este año, con un nuevo horizonte fuera de Mataderos?
-Con mucho entusiasmo, con el desafío de estar en un nuevo club, con compañeros nuevos. Estaba muy contento, tantos los chicos como los dirigentes, me hicieron sentir muy cómodo.

-¿De cuánto valía haber eliminado a Maderense en la Copa? Por más que sea un certamen de preparación, todos quieren salir campeón y más cuando toca el clásico.
-Había sido un envión muy grande, para arrancar. Se estaba formando un lindo grupo y un gran equipo, había mucha ilusión. Una lastima.

-¿Cómo fue tomar la decisión de abandonar Calaveras e ir a un nuevo club?
-Cuesta irse de donde estas tan cómodo, de mi lugar, de mi club. Pero a veces necesitamos un cambio de aire, me gustó la propuesta y el desafío, para tomar la decisión de irme.

-¿Cuánto tuvo que ver Gastón de Antón?
-Gran parte, porque él fue quien me llamó, me contó el proyecto, y como lo conozco y sé su forma de trabajar, sabia que iba a formar un equipo competitivo.

-¿Cuál era el proyecto para este año?
-Apuntarle a lo más alto, si bien íbamos a ir paso a paso, la idea siempre es apuntar a llegar a lo más alto. Con mucho trabajo, complementando experiencia y juventud, con jugadores del pueblo y los de afuera.

-Completas el clásico de la ruta N°5, ya que vestiste los colores de Maderense ¿Cómo fue ese año para vos?
-Ese año había arrancado muy bien, había un gran equipo. Lamentablemente no pude terminar de jugar, porque me lesione la rodilla. Me perdí más de la mitad del año.

-¿Qué genera jugar estos tipos de clásicos, sabiendo como lo vive el hincha, con los dos colores?
-La verdad que es muy lindo. El año que estuve en Madero no pude jugar el clásico, pero este año lo viví y es una locura lo que siente la gente. Desde el primer día que llegué se hablaba del clásico, lo quieren ganar si o si. Gracias a Dios este año lo pudimos arrancar ganado y ver la alegría de la gente, a pesar de ser un partido de preparación, fue increíble.

-¿Extrañas Mataderos?
-Siempre que te vas de tu lugar se extraña, este año no iba a ser la excepción. Pero también estaba muy contento en Progreso.

-¿Cómo ingresó Calaveras en tu vida?
-Yo ingrese a Calaveras, fuimos cuando jugábamos en octava, con todo lo que era la Cooperativa Eléctrica, hice todas las inferiores ahí, le llegue a tener un aprecio muy grande, porque siempre vi el esfuerzo del club por salir adelante.

-¿Qué recordas de ese momento, tus primeras historias en el fútbol, las inferiores?
-Recuerdos hermosos, con algunos juego desde los 5 años, como con Maxi Coronel; esas épocas eran hermosas, de inferiores los sábados, regionalitos los domingos. Era hermoso, nuestra única preocupación era jugar a la pelota.

-¿Qué cambia de jugar en las preliminares a ser capitán del equipo en el que naciste?
-La verdad que es muy lindo, llegar a ser un referente del club al que queres, del que saliste. Fue un orgullo y una alegría muy grande.

-Por ser uno de los más experimentado y llevar la cinta, ¿Eras un referente de Calaveras en esos planteles?
-No sé si referente, si era uno de los más grandes y trataba siempre de aconsejar a los más chicos. Siempre me sentí uno mas

-Estabas con muchos pibes del semillero ¿Cómo vez a los chicos que recién comienza en el "Cala"?
-Hay mucho potencial, hay muy buenos jugadores, depende de ellos si quieren jugar muchos años en primera. Esta bueno que el club apueste a sus jugadores.

-¿Qué es lo que más le recomendas a un pibe que recién comienza?
-Lo fundamental es la conducta, el cuidarse, el no salir y el entrenamiento. El fútbol ha cambiado mucho y hoy por más condiciones que tengas, si no entrenas, no podes jugar.

-¿Qué fue lo mejor que te pasó en el fútbol?
-Para mí, lo mejor fue la gente que conocí. El fútbol me dio mis mejores amigos, tengo muchos y también muchos conocidos, con muy buena relación. Gracias a dios jugué por varios clubes y en todos tengo muy buenos recuerdos.

-¿Cómo describirías tu paso por San Martín?
-Muy bueno, desde el primer momento me hicieron sentir muy cómodo, hay muy buena gente y compañeros excelentes. Me quedó la espina en el 2013, que quedamos afuera de las semis, en el último minuto.

-¿Estaba para ser campeones ese año?
-Le tenia mucha fe, se había formado un equipazo y habíamos encontrado una buena regularidad en el Petit. Pero por esas cosas del fútbol, se nos escapo la semis en el último minuto.

-¿Y cómo fue jugar en Defensores, con todo lo que conlleva ese elenco?
-Muy lindo. “Defe” es uno de los grandes de Pehuajó, la gente siempre te lo hace sentir. Pero lo más lindo era que sentía que defendía la camiseta de mi familia, porque son todos hinchas de Defensores y para mi fue una gran alegría. Era el más chico de un equipo con jugadores ya consagrados, que me la hicieron muy fácil, me dieron siempre toda la confianza.

-¿Cómo era jugar con los colores que simpatizan tus familiares? ¿Era uno de los anhelos de pibe?
-Si obvio, yo salí del barrio y de chico lo seguía a “Defe”, era la mascota, entraba siempre a la cancha con mi tío. Después cuando fui a jugar al “Cala”, le tome un cariño enorme al club, ahí me sentí como en casa, siento que es mi lugar. Pero de “Defe” tengo los mejores recuerdos y los mejores deseos para el club también.

-Supongamos una final, Defensores-Calaveras, tu familia hincha de "Defe" vos jugador de "Cala" ¿Qué te imaginas de esos días?
-Jajaja, que difícil sería. Yo creo que mis viejos querrían que gane yo, porque si bien son hinchas de Defensores, me siguen todos los domingos, juegue donde juegue y con la camiseta que sea. Los más complicados serían mi hermano y mi señora, que son hinchas de “Defe”, jajajaja. Pero creo que en el fondo, también querrían que gane yo, jajajajaja.

-¿Se sueña con ser campeón o es algo que va naciendo al correr las fases?
-Cuando arranca el año todos tienen la ilusión de ser campeón. Después, una vez que va transcurriendo el año, vas viendo para que esta cada equipo. Pero el sueño de ser campeón arranca el primer día de pretemporada.

-¿Por qué se te viene negando esa coronación?
-Sinceramente no sé, jajaja, porque he estado en muy buenos equipos, jugando semifinales y quedando muy cerca. Pero tengo fe y confío, que ya se va a dar.

-¿Es un pendiente que tenés en tu carrera?
-Seguro, creo que es lo único que me falta, como para poder decir, estoy completo con la carrera que hice en la LPF.

-¿Cuál fue el momento en el que peor la pasaste, dentro del fútbol?
-En el 2014 estuve todo el año sin poder jugar, me rompí los cruzados y me perdí todo el año. Había pensado en dejar todo, me la pasaba llorando.

-¿Cómo fue ese momento? ¿Cuánto tuvo que ver tu entorno, para que hayas vuelto a los terrenos de juego?
-La verdad, durísimo, la recuperación me llevó todo el año y gracias a mi familia, que me apoyaron en todo momento y en algún momento me levantaban la voz y me retaban, jajajaja; fue que junte fuerzas para volver a jugar.

-¿De que manera viviste el primer juego, tras la recuperación?
-Ya en el 2015 arranque la pretemporada, a la par del grupo, estaba muy ansioso y con algo de miedo. Pero a medida que hacia fútbol en las prácticas y amistosos, me iba soltando. Cuando arrancó la liga, ya estaba bastante bien y fue una alegría inmensa volver a jugar; me acuerdo que el día que volví a jugar, recibí muchísimos mensajes de apoyo.

-Volviste y al año salió campeón Calaveras, pero vos estabas fuera ¿Cómo viviste ese campeonato?
-Si, volví y al año fue que me fui a Madero, temporada en la que “Cala” salió campeón. Yo trabajaba con Fede Manzo, que jugaba en el club en ese entonces y siempre les deseaba lo mejor. Es más, fui a ver las finales y obviamente me puse muy contento, porque quiero al club y aparte mis amigos estaban jugando ahí.

-¿Cuál es el anhelo futbolístico que tenés actualmente?
-Por lo pronto, que pase todo esto y volver a jugar. Después, obviamente, obtener el campeonato, que es lo único que me falta para decir "ya está, cumplí todas mis metas".

-¿Con que soñabas cuando eras pibe?
-Uno de chico siempre sueña en grande, jugar a nivel profesional y vivir del fútbol. Jugar en Boca fue mi sueño.

-¿Qué le dirías a ese Matías Tolosa que recién comienza?
-Que persiga sus sueños, que no desaproveche ninguna posibilidad, porque con trabajo y constancia, puede llegar muy lejos.

-¿Te arrepentís de algo?
-Tuve posibilidades de pasar a jugar a clubes de ascenso y como recién volvía de Santa Rosa, de jugar en MacAllister, no me quise ir; me acuerdo que me vinieron a buscar a mi casa y les pedí que vuelvan al rato, que me dejen pensarlo y cuando volvieron, les dije que no, jajaja. No es que me arrepiento, pero si a veces me pongo a pensar que hubiese pasado si me iba.

-¿Cómo fue ese momento, que te decían de ir al ascenso?
-Era de Barracas Bolívar que me vinieron a buscar y en ese momento querían que me vaya con ellos, me daban pensión y todo. Es lindo que te vengan a buscar a tu casa, quiere decir que algo tenés. Pero no quise ir, me quise quedar jugando acá.

-¿Cuál fue el momento más emotivo que viviste en el fútbol?
-Creo que entrar a la canchas con mis hijos cada domingo, es hermoso. Después en la semis del 2015, en cancha de Calaveras, cuando hice el gol de tiro libre, que forzamos el tercer partido, en ese festejo se me vino a la cabeza todo lo que había pasado con la lesión, entre otras cosas, imágenes de mi familia. Ese momento fue muy lindo.

-¿Qué recordas de tu infancia con la caprichosa?
-En el barrio era todo pelota, salir de la escuela cambiarse y a jugar a la pelota, los sábados arrancábamos a las nueve de la mañana, parábamos a comer y después otra vez pelota, una infancia hermosa. Después cuando empecé a jugar en el club, era sábado inferiores y domingo regionales. Muchos viajes, en esa época con la Cooperativa viajábamos mucho a jugar a otros lados. Mi infancia gracias a dios fue pura pelota, fue hermosa.

-¿Te imaginas un Matías Tolosa sin haber sido futbolista?
-No, sinceramente no, porque gran parte de mi vida es fútbol. No me vería haciendo otra cosa que no sea fútbol.

-¿Y el después del fútbol? Te vez colgando las botas.
-Es algo que ya se piensa, ya estoy casi en 32. Si bien me siento bien físicamente, no sé si me veo jugando hasta los 40, capaz que a los 35 si, pero hasta ahí nomas. Después, no sé, aunque me gustaría trabajar con chicos, en inferiores.

-¿Con la del “Cala” tiene que ser el retiro?
-Ojalá que sí. Viste que eso depende del técnico que este en ese momento, si me va a tener en cuenta o no. Pero mi idea es retirarme con la del “Cala”.

-Hagamos de cuenta que no conozco el club, que no conociera ningún club de la ciudad ¿Cómo me venderías a la institución?
-Calaveras es un club muy humilde, qur siempre trata de darte y brindarte hasta lo que no tienen. Un club con muchas ganas de trabajar y salir adelante. Un club donde se respira futbol.

-¿Y los de Matadero?
-El verdadero hincha siempre acompaña, siempre están, en las buenas y las malas. Matadero es mucha familia, un club muy familiar.

-¿Algo más para agregar?
-Saludo a mi familia y amigos, que son los que están siempre bancándome. Después, que ojalá esto pase rápido, que podamos volver a la vida normal y podamos volver a patear la pelota pronto.

Jonhy Laugle