Tomas Arive:"Se podría hacer un libro tranquilamente de anécdotas. Pero la mayoría no se podrían contar"

Edición número 98 de la nueva sección que brindamos en nuestra web con un protagonista que compone la Liga Pehuajense de Fútbol. Distendida, conociendo al protagonista desde otro lado. Es el momento de un sangre 100% "Azul". Es el turno de Tpmas "Poroto" Arive.

¿Dónde arrancaste a jugar al futbol y por qué?
Arranque en Deportivo. Tenía 7 años. El técnico era “Pinocho” Fernández. Como el Club no tenía escuelita, siempre me ponían con los más grandes. Me acuerdo que en inferiores, hasta llegar a quinta división, era perder todos los partidos. Más con Estudiantes. Siempre nos goleaban. Pero ahora más contento, porque desde juego en Primera, muy pocas veces perdí con Estudiantes. Y comencé porque me gustaba jugar y mi familia me llevó a Deportivo. Todos somos de Deportivo y orgulloso de mi parte.

¿Ya viene desde la panza ser Arive y ser de Deportivo?
En la actualidad viene así. Antes no. Mi familia es de Madero y eran de Maderense. Cuando vinieron a Pehuajó, eligieron a Deportivo. Hoy es raro que un Arive no esté en Deportivo.

¿A qué edad y en qué año debutaste en Primera?
Debuté contra Progreso de Juan José Paso en cancha de Deportivo. Empatamos 1 a 1.Debuté junto a Bruno Cardone. Nos pusieron de titular ese partido, porque Deportivo no tenía chances ese campeonato. Después de ese partido, siempre estuvimos en el plantel de primera y jugamos muy pocos partidos en Reserva.

Con 14 años, me imagino que los nervios serian grandes…
Bastante eran los nervios. Más que nada porque era un pibe. De ir a ver a tus ídolos a compartir vestuario y entrar con ellos, los nervios eran grande. Estaba el “Chaca” Martín, “Cogote” Rojas, “Gato” Diaz y el mismo Alejandro Galeano. Ya entrar al vestuario así de una fue fuerte. Los nervios se sintieron desde la citación.

Me nombraste a Bruno. Se podría hacer un libro de anécdotas que han tenido juntos.
(Risas) Se podría hacer un libro tranquilamente de anécdotas. Pero la mayoría no se podrían contar. (Risas) Hay una anécdota, donde “Carlitos” Amoroso era el preparador físico y nosotros recién empezábamos a entrenar con Primera. También eran nuestras primeras salidas a la noche. Nos costaba mucho entrenar. Cuando nos mandaban a correr, nos mandaban por atrás del puente y nosotros íbamos últimos. Llegando a la virgen, siempre esperábamos un camión que pase y nos enganchábamos. En la loma de burro que está en San Martin nos soltábamos y llegábamos corriendo. (Risas) Locuras de pibe. (Risas)

¿Siempre salió bien engacharse? ¿Nunca los agarraron?
No, una vez nos salió mal. Jugábamos por los torneos bonaerenses en el playón de la escuela normal. Teníamos que ir a nuestras casas a esperar que con quien nos tocaba jugar. Por la calle Dean Funes, vimos que el camión iba muy fuerte y no paraba nunca. Había agarrado la avenida Sastre y nosotros teníamos que hacer cuatro cuadras en el camión. Pero ya iban como ocho. Hasta que le digo, “Bruno me tiro, anda a saber cuándo frena”. Me tiré desde el camión y me pele todo. Imagínate, pleno asfalto. No pude aguantar la velocidad del camión y me pelé todo. Bruno vio que no me levantaba y se tiró. Conclusión, fuimos los dos a jugar todo pelado. (Risas)

¿Le hacían sentir los más grandes a ustedes que eran los más pibes del grupo o buena onda?
No. Si hay algo que siempre admire y estoy orgulloso, es que los compañeros más grande siempre nos hicieron sentir muy hincha del Club, acompañado y aconsejándonos siempre. Cosa que aprende uno y hoy nos toca a nosotros aconsejar a los más chicos. Siempre era compartir hasta asados y divertimos. Hoy tenemos la amistad con todo. Es lo mejor que te da el fútbol.

¿Te animaste a hacerle alguna broma?
Si. Si en algo somos especialistas es en hacer bromas. (Risas). Los mayores ya nos conocían. Ojo, igualmente ellos nos enseñaron. “Cogote” Rojas era un especialista y nos enseñó a hacer muchas. (Risas) Me acuerdo una que a él le pusimos material fecal humana en la manija del Renault 9 que tenía. Tenía que meter la mano de la manija para abrir el auto. Cuando fue abrir el auto para irse, se quedó con el excremento en la mano. (Risas) Después hay muchas más. A Hernán Mateo lo hicimos viajar a Casares. Que lo llamaba un equipo para jugar la liga de allá. Se jugaba un nocturno después de la liga de Pehuajó. Mateo había tenido un año bárbaro en Deportivo. Lo llamamos nosotros del Club Boca que tenía que presentarse a un amistoso, un domingo a las tres de la tarde en enero. Pleno verano. Se fue hasta Casares, cuando llega al Club Boca, había un candado grandote en el portón. (Risas). Empezó a llamar al número que lo habían llamado. Obviamente, nunca lo atendimos. (Risas)

¿Cuál fue tu mayor tu mayor alegría en el fútbol?
Mi mayor alegría fue haber conseguido mi primer campeonato. Luego de perder tres finales te sacas una espina tremenda. Los otros títulos también se disfrutaron, pero el que más recuerdo es ese. Aparte del gran equipo que teníamos. Después alegría son los entrenamientos, son los asados y las previas a los partidos. Esos detalles también son la alegría del futbol.

¿Te trajo problemas familiares cuando le hiciste un gol a Deportivo?
No, para nada. La familia me apoyo en las decisiones que tomé. Ese año necesitaba un cambio de aire. Siempre le hace bien al jugador. Fíjate que en 2008 jugué en KDT. Agradecido a la gente del Club que me haya llamado, por el trato y fui por una persona especial. Fui por el “Vasco” Landaburu, que es un grande en el ambiente del fútbol. Fíjate que al otro año volví con todo a Deportivo, logramos el título y el primero mío. Ese año que estuve en KDT, le hice un gol a Deportivo y lo grité. Pero se lo grité a un “gordito” que estaba atrás del alambre y me puteaba. Me tomo siempre todo con humor, lo señalé y le dije, “para vos es el gol”. (Risas) Anécdotas de fútbol.

Me decís anécdotas de fútbol. ¿Cómo fue la tarde que tuviste que ir al arco?
Dos veces me tocó ir al arco. Una en el 2006 con Defensores. Ganábamos 1 a 0 y lo echan a Hugo Tolosa. No me acuerdo si teníamos arquero suplente o habíamos hecho los tres cambios. Agarro los guantes yo. La primera que patean, gol. Digo, en la que me metí. Para que mierda agarré los guantes. (Risas) Terminamos ganando 3 a 1. Después en KDT, lo echan a Ugalde y me toca ir al arco. Perdemos 1 a 0. Me hacen el gol de penal a mí. Fue contra Progreso en un torneo preparación. Promedio malo mío de arquero. En pocos minutos me hicieron dos goles. (Risas)

¿Cuál fue la mejor patada que te dieron en tu carrera?
Patada no recuerdo ninguna. Lo que si recuerdo es una piña en el año 2005, de “Chaqueño” Nascimento. Se arma un tumulto con Mayoz, que le dieron 18 fechas a él y ahí en el tumulto me ligue una piña en el medio de la cara. Estuve una semana comiendo con bombilla. (Risas) Tremendo piñón me ligue. Encima que ligue la piña, me echaron en ese partido. (Risas)

Y al otro año fueron compañeros…
Claro, al otro año fuimos compañeros. Yo jugué el Regional para Defensores y en el primer entrenamiento que hacemos fútbol, un reducido, me pegó una patada que me levantó para arriba. (Risas) Yo no decía nada. Era más grandote y le tenía respeto. Más o menos a los cuatro meses empezamos a hablarnos. Ahí nos hicimos amigo. Costó. Tuvimos una charla, nos pedimos las dos disculpas y después lamentablemente paso lo que paso. Una pena. Lo lamente mucho, una gran persona era. Me acuerdo que al otro año jugamos en contra, donde ya estaba todo bien y nos saludamos. Donde ante yo ni me le arrimaba. Gracias a la llegada a Defensores nos pudimos llevar bien.

¿Cuál fue tu mayor tristeza en el fútbol?
Las mayores tristeza, fueron las primeras finales que perdí. Temporada 2002, 2004 y 2005. Las tres las sufrí de la misma manera. Por ahí sufrí un poquito más la de 2005. El primer partido lo perdemos 4 a 0 y después empatamos. En la vuelta, el “Vasco” (Mendizábal) me pone de suplente. Íbamos ganando muy bien 2 a 0 y nos termina empatando Calaveras. Entro a la cancha cuando íbamos ya empatando. Me fui muy triste. Me acuerdo que me fui caminando a mi casa llorando. Con el transcurrir del tiempo se curan las heridas. En el 2009 tuve revancha y con el “Vasco” de entrenador. Él también tuvo su revancha, porque había sufrido igual que yo.

¿Es un personaje el “Vasco" como entrenador?
Un gran personaje y un gran técnico. Los años que estuvimos, lo bien que la pasamos. Eso no tiene precio. Aparte tanto él como yo, los dos lo hacíamos por amor al Club y por amor al fútbol, sin interés por nada. Hemos puesto más de lo que hemos sacado. Todo lo hemos hecho de corazón.

¿Lo volvían un poco loco?
Demasiado. Ojo, él también nos volvía loco a nosotros. Los entrenamientos y los asados con él, nos gustaba mucho. Era divertimos y pasarla bien. Siempre agradecido a él, más allá de alguna pelea que hemos tenido por el fútbol.

Si tenes que armar tu 11 inicial con jugadores que han sido compañeros tuyos. ¿Cómo formaría el equipo de Tomas Arive?
Julio Diaz al arco. Por los laterales, Julián Huguenin y Damián Martínez. Los dos más campeones con Deportivo. La dupla central seria Malchioddi y Magiorano. En el mediocampo lo pongo a Lucas González, “Tatu” Galarreta y “Chavo” Collado. Y juego con tres puntas. Bruno Cardone, Santiago Bacas y “Chaca” Martín. En el banco como arquero suplente “Leo” Balbi. Pero si se lesiona Julio o pasa algo, sigue atajando igual. (Risas) Leandro Rojas, Daniel Salguero, Mauricio San Rufo y Federico Peredo. En mi equipo yo no me pongo.

Si tenes que elegir tres compañeros. Uno para hacer el asado, otro para la música y el otro para la bebida. ¿A quién elegís?
En el asado “Yeye” Barros. Ese no falla. Para la bebida el “Peca” Ferracci. Para la música lo pongo a Bruno Cardone.

Hoy que sos jugador, hincha o dirigente. ¿Te retiraste o vas a seguir con los cortos?
Este año estaba como dirigente. Me había retirado. Pero bueno, el año que viene no se sabe. (Risas) Alcanzamos a jugar dos partidos y no lo sufrí. No me veía con ganas de estar adentro de la cancha. El año que viene, quien no te dice que me vuelva a poner los cortos. Pero ahora hay que esperar. No queda otra.

Pero un partido en la nueva cancha cuando la terminen no podes no darte el gusto.
Ni hablar. Ese gusto me lo voy a dar. Como sea. Un entrenamiento, un partido oficial y si no es oficial, un amistoso o armarlo con amigos. El gusto de jugar ahí me lo voy a dar. Pero bueno, a la obra le falta, esto de la pandemia atraso todo y yo cada vez estoy más viejito. (Risas)

¿Qué es el fútbol y Deportivo en tu vida?
El fútbol es el deporte más lindo que jugué. El fútbol es todo. Deportivo es lo más grande que hay.