"Caracol" Paredes: ““Teníamos 10 meses de progreso en la Colimba cuando nos dijeron que nos llevaban a Malvinas. En ese momento no teníamos idea de lo que pasaba"

 

Nacido en Daireaux, el futbolista habló de su comienzo en el barrio, la inolvidable Guerra de Malvinas y su pasión por el fútbol. Conoce esta gran historia.

Juan José “caracol” Paredes nació en la Calle Bolívar, en Daireaux. Un apasionado por el fútbol, pasó de jugar en el barrio con sus amigos a participar en equipos profesionales.

“De chiquito escuchábamos una pelota y salíamos a jugar, dejábamos todo lo que estábamos haciendo para ir. Hasta jugaba descalzo en un terreno baldío frente a mi casa, ahí en la Bolívar”, recordó.

Ya de pequeño mostraba sus habilidades en el fútbol de barrio, como así lo denomina. Sus primeros pasos fueron en el fútbol local, primero en las inferiores de Bull Dog, aunque los entrenadores en reiteradas oportunidades lo llevaban para ser parte de la primera división.

“Me citaban para estar en primera, pero siempre quedaba en el banco de suplentes y a mí no me gustaba. Yo quería jugar, nada más. Me quería ir, hasta que me empezaron a poner en varios partidos y podía demostrar todo lo que podía hacer dentro de la cancha”, explicó el «Caracol».

Y aclaró: “Iba porque tenia la autorización de mi padre. Ahí si no tenías la firma de tu papá no jugabas en primera”.

Su paso por la Guerra de Malvinas

Con 18 años y en pleno desarrollo futbolístico, Juan José debió realizar el servicio militar obligatorio, un proceso que la mayoría de los adultos jóvenes cumplía en ese entonces.

“Empecé la colimba en Bahía Blanca, ahí fuimos con unos más, pero había una persona amiga que manejaba mucho contactos por ahí dentro y gracias a él pudimos ir a la base de Punta Alta”, contó.

“Teníamos 10 meses de progreso en la Colimba cuando nos dijeron que nos llevaban a Malvinas. En ese momento no teníamos idea de lo que pasaba, no teníamos conocimiento, solo te preparaban para algo que podía llegar a pasar. Si me preguntás no pensé que podía pasar, yo fui pensando que hacia esto y me volvía a darme de baja”, explicó el ex futbolista.

Juntos a sus compañeros y amigos de la ciudad fueron cargados en una camioneta y los llevaron a Puerto Argentino y de ahí a la Isla Borbón: “Llegamos a la Isla. Primero le tocó estar a “Huguito” (Hugo Mendoza) y después me llevaron a mí. Estuvimos hasta el final juntos en la isla”.

Juan José relató cómo fueron sus días en la guerra: “Hacíamos guardia todos los días en el mismo lugar, y ahí nos quedamos hasta el final, esperando…esperando que alguien viniera, uno no está preparado para matar a nadie”.

“Si ellos querían hacían un desastre, pero no quisieron porque sino nosotros hoy en día no estaríamos acá”, analizó.

El fútbol, la gran oportunidad de «Caracol»

Luego de su regreso al país, Juan José volvió al fútbol. Pasó por varios equipos de la región, hasta llegar a Quilmes, que estaba recién ascendido en primera.

“En el año 1983 jugué mis primero partidos en Mones Cazón; ahí salimos campeones. Al año siguiente subcampeones, y ahí fue cuando Deportivo, nuestro rival, me llevó a un regional”, relató.

Desde ese entonces fue el puntapié para su salto a los equipos más importantes de la región, pasando por Bahía Blanca, Azul, Bolivar, Pehuajo. Pero su gran momento llegó en Buenos Aires.

Fuente: noticiasd