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Orgullo familiar tras el debut: “Felipe estaba en el Colegio San José, entraba a las 7 y lo retiraban a las 10 para viajar a Buenos Aires, entrenaba y volvía, y en el camino llamaba a la mamá, que le pasaba las tareas para volver al Colegio al día siguiente”


 

El padre del jugador que ayer debutó en la primera división de River, César Peña, trazó un balance de los últimos días en la vida de Felipe y toda su familia, destacando que ya el pasado domingo estuvo muy cerca de debutar, ni más ni menos que en el clásico ante Boca, luego del brote de COVID que sufrió el equipo. 

Señaló que lo de ayer es el premio a muchos años de trabajo responsable y constante por parte del joven, que allá por 2011 cuando jugaba en las inferiores de Estudiantes Unidos de Pehuajó, fue convocado a probar en River.”Unos días antes de la prueba, se fracturó un dedo del pié jugando en la pileta y se demoró todo” comentó el ex Intendente de Pehuajó, que indicó que a los 12 años, Felipe era parte de las infantiles de AFA. Además, destacó y agradeció el trabajo del técnico de entonces, Pablo Lavallén; dijo que en ese momento Felipe estaba en el Colegio San José, entraba a las 7 y lo retiraban a las 10 para viajar a Buenos Aires, entrenaba y volvía, y en el camino llamaba a la mamá, que le pasaba las tareas para volver al Colegio al día siguiente con todo hecho.

César Peña indicó que cuando la gente del Club pidió que Felipe entrenara permanente con ellos y se hizo necesario radicarse en Buenos Aires, hubo una charla familiar en la que el jugador manifestó su intención de seguir su carrera deportiva, y luego su hermano menor aceptó dejar de lado su escuela y su club, para acompañarlo; de este modo, toda la familia se mudó en busca del sueño. Hubo un solo pedido de los padres, y fue que mantenga sus estudios además del fútbol, y hubo que insistir hasta que finalmente el pehuajense ingreso al Instituto River, donde tuvo un excelente rendimiento y fue abanderado en varias oportunidades.

César Peña indicó que en aquel momento, la familia se unió para acompañar a Felipe, pero en el partido de ayer, las circunstancias llevaron a acompañarlo por separado, ya que la mamá está con Felipe; el hermano en otro departamento, cumpliendo aislamiento; los demás hermanos cada uno con sus familias; y el padre, por cuestiones laborales, lo siguió desde Pehuajó, aunque todos en contacto permanente a través del chat familiar. Comentó que anoche pudo hablar con el jugador, que se mostró feliz, satisfecho por el deber cumplido y muy cansado, aunque esperando la confirmación del horario para entrenar mañana, porque “el fútbol es así, hay que disfrutar el momento y seguir” dijo el orgulloso papá, para luego agradecer a la gente de Pehuajó que siguió el partido, compartió esta alegría y sabe disfrutar de que a otro pehuajense le vaya bien, como ha pasado tantas veces en la historia de distintos deportes, donde Pehuajó tiene grandes referentes.

Fuente: Radio Magica