Se vuelve a postergar la vuelta de Felpe Peña Biafore: "No voy a negar que es jodido afrontar tantas recuperaciones, pero yo quiero jugar al fútbol"

La frase de Felipe Peña Biafore es de marzo, cuando recién volvía a hacer trabajos con pelota luego de su rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha del 7 de noviembre del año pasado, pero tranquilamente se podría aplicar a este momento. Otro complicado que vive por culpa de una nueva lesión, que si bien no es tan grave como la anterior, no le permite entrenarse y quizás lo aleje de las canchas hasta el 2023.

Porque cuando todo empezaba a marchar bien, con partidos en la Reserva para sumar minutos y rodaje de competencia (el 18 de junio jugó el primero), hace poco más de un mes se encendió la alarma: había dejado de ser convocado por molestias en la rodilla izquierda. Y ahora se confirmó que tiene un edema óseo en esa zona, es decir, un moretón que debilita el hueso. Por esa razón, el joven de 21 años por el momento no volvió a hacer fútbol producto del riesgo a que un impacto agrave el cuadro (como por ejemplo, con una fractura).

Al tener unas potenciales consecuencias más serias, entonces, Peña sólo realiza trabajos específicos en el gimnasio monitoreado tanto por los médicos como por los profes de River. Además, no le ponen plazos de recuperación y aguardan por la evolución día a día: se cura con hielo, analgésicos...

Mucho en pocos partidos

Este edema óseo en la rodilla en la que ya había sufrido dos roturas del ligamento cruzado anterior en Inferiores representa otra prueba más de resiliencia para un Felipe Peña que no ve la hora de volver a demostrar todas sus condiciones en el césped híbrido del Monumental. Porque si bien parece que tuviera una gran cantidad de partidos en Primera, recién tiene nueve, de los cuales todos fueron como titular y algunos en situaciones extremas.

Dicho ya el de Independiente Santa Fe, también jugó aquel recordado encuentro contra Sarmiento en Junín, en el que River tuvo muchas bajas entre lesionados y convocados a las selecciones (lo ganó en el final con gol de Enzo Pérez). Ésa fue, de hecho, su carta de presentación como defensor: si bien en las juveniles había sumado algunos juegos en esa posición, logró llamar la atención de Gallardo como el volante central de la Reserva, mostrando una gran capacidad para distribuir la pelota, tocar, marcar y hasta convertir en algunas ocasiones.

Pero para volver a realizar todo eso habrá que esperar, algo que -lamentablemente- Peña ya está acostumbrado a hacer desde chico, a pesar de su corta edad. Ahora lo espera otra recuperación, siempre con el deseo latente de “jugar al fútbol”, lo que más le gusta.

Fuente: Olé