Gastón Lorenzo: “La emoción fue tan grande al ganar, que se bajó la bandera a cuadro y se me vino un montón de cosas a la cabeza. Era algo que soñaba mucho desde chiquito cuando veía correr a mi viejo y a mi tío”
El piloto de Henderson, Gastón Lorenzo, chaló con Lanza la Bola Deportes luego de su primer triunfo en las CRAS.
El "Gato" contó sus sensaciones luego de la victoria, lo que fueron las semanas posteriores, lo que se viene y sus inicios.
¿Cómo fueron las semanas después del triunfo?
La verdad que muy lindas. La primera semana se hablaba
todos los días de la carrera, después comencé a caer de a poco y lo que había
logrado porque está muy fuerte la categoría. Hace muy poco que corro y llegó
muy rápido el triunfo.
(Risas) No, me salió así. No sabía que no se podía dar
una vuelta más. Gente allegada me paró en la pista y tuve que frenar. La
emoción fue tan grande al ganar, que se bajó la bandera a cuadro y se me vino
un montón de cosas a la cabeza. Era algo que soñaba mucho desde chiquito cuando
veía correr a mi viejo y a mi tío. Siempre soñé con esto y se me vino ese
momento a la cabeza.
Hubo un buen asado el jueves después de la carrera.
Estuvieron todos los que están siempre. Es mucha gente la que me da una mano.
Juntamos cincuentas personas. Muy contento que me acompañen tanta gente.
Se hizo un repaso general de todo el auto. Estamos colocando la bria que nos corresponde
y vamos a probarlo un poco para ver cómo se comporta. Falta la alineación y
después está prácticamente listo.
La clave está en hacer una buena clasificación. Poder
largar lo más adelante posible es fundamental. Con respecto al circuito,
haciendo bien la parte trabada y saliendo prolijo a la horquilla, el tiempo
tiene que salir, si el auto anda bien y uno se adapta al circuito.
Desde chiquito que seguía a mi viejo y a mi tío cuando
corrían el rally cross. Muy fanático siempre y los seguía a todos lados. Cuando
nació las CRAS, de a poco me fui involucrando e iba a ver las carreras. Ahí
empecé a molestar a mi viejo de comprar un auto. Mi idea era correr en una mini
o un 128. Pero mi viejo me dijo de un auto grande y por eso un falcon. Lo
compramos y lo empezamos a armar. Así arranqué y aca estamos.
Me acuerdo que cuando debuté estaba estudiando en Azul.
Me llama mi viejo un miércoles a la noche y me dice, conseguí un motor en Monte
Hermoso y lo voy a buscar. Le digo, dale, termino de cursar y me voy a Henderson. Trabajamos los tres
días casi sin dormir. El sábado quedó en marcha. No tuve mucho tiempo para
ponerme nervioso. (Risas). Anduvimos bien ese domingo. La felicidad fue que
pude girar y terminar ambas finales.
Es uno de los pilares fundamentales. Me da una mano, en
el auto y económicamente. De hecho estamos anotado como binomio. Una o dos
carreras correrá él. Mi familia, mi novia y amigos también son fundamentales.
La familia Brion me da una mano grandísima. Después el motor lo hacemos con un
hombre de La Plata, “Tito” Garitano y el chasis se trabaja con el “Pampa”. Es
mucha gente la que está detrás de este proyecto.
(Risas) A cualquiera de los dos no tendría problema. Mi
tío, tiene una forma muy parecida de manejar a la mía y me gusta, porque no soy
tan agresivo. Soy muy tranquilo. Mi viejo tiene una forma más agresiva de
manejar, en el buen sentido. Hoy se lo daría a mi viejo por la gran mano que me
está dando. (Risas)
Agradecerles a mi familia que siempre me acompaña. A mi
novia que está en cada carrera. A mis amigos que muchos no están por estudios,
pero que están por radio o con un mensaje alentando. A los que me dan una con
el auto. A mis auspiciantes. En especial al “Colo” Brion, a Raúl, Alejandro y
Andrés Brion. Al “Pampa” y a Tito.
Seguramente me olvide de muchos pero agradecido siempre porque a ellos hoy
estoy corriendo.
Foto: Jonatán Teves Fotografías.