El de Pehuajó valora con MARCA lo que ha dado de sí la temporada y lo que espera de la siguiente, la última como profesional tras 30 años de carrera.
Fernando Belasteguín (Pehuajó, 1979) ha vivido un año
complicado. El que ha sido el penúltimo de su carrera deportiva y antes de encarar un 2024 en el que se
despedirá del pádel. Ahora, el argentino, lesionado de nuevo del codo, tiene ya
el foco puesto en su temporada de adiós y en la que quiere acabar sano,
competitivo y dando guerra con los 45 años que cumplirá el próximo mes de mayo.
Ahora analiza con MARCA lo que ha dado de sí un 2023 que
empezó con Sanyo Gutiérrez y que acabó con Mike Yanguas y también los motivos
que le han llevado a poner fin a una de las trayectorias más exitosas no sólo
del pádel, sino del deporte en general.
PREGUNTA. ¿Tiene un regusto amargo de cómo ha terminado
el año?
PREGUNTA. Preocupado, la verdad, porque había hecho una recuperación
muy buena con todo el equipo, al detalle. Hasta el jueves anterior a la semana
del torneo me sentía espectacular, entrenando con intensidad... pero luego
llega la competición y me empieza a molestar, un 'algo' que hizo que me vuelva
a lesionar. Este lunes me hicieron resonancia y eco, me trataron con factores
de crecimiento y ya estoy enfocado en curarme bien. En cuatro semanas tendré
una nueva revisión para ver como va. Estoy algo triste pero son cosas que
pasan, me conciencié para cerrar el año con Premier Padel pero son cosas que pasan.
P. ¿Cómo ha llevado este año con dos lesiones y lo que
han desencadenado, como el fin del proyecto con el que iniciaste la temporada?
R. La primera supuso el cambio con Sanyo, pero son cosas
que no podemos controlar. Aunque te cuides mucho sabes que es algo que puede
aparecer, así que este año me quedo con la tranquilidad de que si me he
lesionado es porque me tocaba y ya está, no le doy muchas más vueltas. Las
primeras lesiones graves sí me costaron un poco más porque ahí te entran más
dudas, pero estas, la de abril y la del final de año, me hacen enfocarme en
unas vacaciones distintas para recuperar el codo y empezar bien 2024.
Muchos piensan 'todo lo que aprendieron Coello y Tapia de
Bela'; yo lo veo al contrario, ¡me hicieron ganar torneos con más de 40 años!
P. Hace más de un año de su último torneo. ¿Echa de menos
ganar?
R. Sin duda. No he ganado un solo torneo y solo he jugado
una final, y ahora es cuando empiezo a valorar lo que venía haciendo. Incluso
el año pasado que gané cuatro torneos con Arturo podía pensar que me sabía a
poco, "qué poquito gané..." se me podría haber pasado por la cabeza.
Hasta que no ganas ninguno no te das cuenta de que lograr cuatro en un año es
espectacular. Lo terminaré de valorar cuando ya no juegue más, y ahí tomaré
conciencia de la suerte que he tenido y de haber estado 27 años seguidos
ganando al menos uno. Eso sí, esto es la evolución propia del deporte, y cuanto
más ganas, más cerca estás de perder. Nadie es invencible y tampoco te cansas
de ganar, y en mi caso no gano más porque no puedo. Las cosas no ocurren por
casualidad y eso significa que el nivel de juego no ha sido acorde, ni más ni
menos.
P. Siempre nos dice a final de cada año que está convencido
de que lo mejor de su carrera está por llegar. A un año de colgar la pala,
¿sigue manteniendo ese pensamiento?
R. Sí, de verdad, y por eso me quiero curar bien ahora.
El año que viene quiero concentrarme mucho en los campeonatos y prácticamente
no jugar exhibiciones y tal. Quiero disfrutar de mi último año como
profesional.
No he ganado un torneo por primera vez en 27 años y ahora
es cuando empiezo a valorar todo lo logrado
P. Confirmó en Milán que no seguirá con Yanguas y que ya
tiene nuevo compañero para 2024.
R. El mundo del pádel es muy pequeño y ya prácticamente
todos saben con quién jugaré el año que viene, y este lunes hablándolo con él
quedamos en comunicarlo después del Master con una foto juntos, algo más
personal, así que la semana que viene todo el mundo lo sabrá. Estoy muy
contento.
P. ¿Qué busca con su nueva pareja?
R. Por los puntos
de ambos estamos en el top-8 del ránking y el objetivo es acabar 2024 juntos
ahí, entre las ocho mejores, y eso solo se puede conseguir estando sanos y con
un buen nivel de juego. Mira, la semana pasada antes de Milán, pensé en las
vacaciones, que este año serán especiales porque creo que empezaré a entrenar
antes, estoy con muchas ganas. Este año me ha costado un poquito lograr una
motivación propia para sacar mi mejor versión, porque en muchos tramos mi mayor
motivación era ayudar a Mike a jugar su primer Master Final. A mí se me nota
mucho por mi estilo de juego, y si no estoy a full tengo muchos altibajos, no
encadeno tiros buenos que hagan daño... En 2024 esta energía va a ser la clave,
y si estoy sano y motivado creo que podemos dar pelea los dos.
P. ¿Nota alrededor algo 'diferente' con respecto a usted al saber que encara ya
su último año como profesional?
R. En casa no, la verdad, pero mis amigos sí que tienen
ganas de disfrutar el año que viene conmigo. En el equipo técnico no,
simplemente nos enfocamos en ir torneo a torneo y a jugarlo como si fuese el
último, y si me pasa algo grave por lo que sea y ahí se tiene que acabar, pues
se acabó. Uno se puede retirar como uno quiere, que es jugando todo el año... o
no. Esto se escapa de mi control pero tengo claro que no me voy a dejar nada
guardado.
Este año me ha costado un poquito lograr una motivación
propia para sacar mi mejor versión, porque en muchos tramos mi mayor motivación
era ayudar a Mike a jugar su primer Master Final
P. ¿Está descartado completamente ver a Bela en 2025?
R. Completamente, lo tengo super claro. Quiero cerrar el
círculo de 30 años como profesional, y sobre todas las cosas quiero estar en mi
casa en un momento en el que mis hijos entran en edades delicadas ya. Uno ya
está en la adolescencia, la que le siga entrará el año que viene... y en esta
etapa quiero estar. Mi señora se ha echado la familia al hombro en estas
anteriores y he adquirido un compromiso familiar. La adolescencia es un periodo
complicado en esto de ser papá y quiero estar para levantarme a las 3 de la
mañana e ir a buscarlos de fiesta, para explicarles todos los peligros que
puedan encontrarse en la calle...
P. Este año lo han dejado Juan Martín, Lima, Mati Díaz...
y en contraposición Arturo y Agustín, que jugaron con usted, se colocan números
1. ¿Cómo vive en mitad de esta locura?
R. Siempre observo estas cosas desde el lado positivo.
Juan y Mati son mayores que yo, Pablo es siete años menor... me hace ver que debo
seguir disfrutando de poder competir, más aún con Pablo y la lesión que le ha
hecho dejar de jugar. Soy un afortunado por estar peleando con las mejores
parejas y ojalá sea yo el que decida dejarlo, y no una posible lesión. Luego
por el lado de Agustín y Arturo pienso en la suerte que tuve que cuando les
llamé aceptaron jugar conmigo. Les llamé con 40 y 42 años y quizás con otros
compañeros no hubiese logrado ganar varios campeonatos. 'Cuánto han aprendido',
dice la gente sobre ambos cuando estuvieron a mi lado, y yo lo veo al
contrario, de verdad. Me hicieron ganar con una edad altísima.
En 2024 jugaré cada torneo a full como si fuese el
último, y si me pasa algo grave en alguno y tiene que acabarse ahí, pues se
acabó
P. Un tema de actualidad: Lebrón y Galán. ¿Le
sorprendería que se separasen?
R. Es difícil ponerme en su piel, e imagino que uno o los dos igual quieren tomar caminos
distintos. Quizás la decisión se tomó tiempo atrás ya ahora se ven ganando
cuatro torneos en el tramo final... no sé esto puede ser un maquillaje a todo.
Igual siguen y el año que viene no ganan ninguno de los 3-4 primeros torneos y
vuelven esas sensaciones... no lo sé. Son ellos los que deben tomar la
decisión, han sido números 1 tres temporadas consecutivas y yo no vería mal si
lo deciden. Dicho esto, son dos jugadores espectaculares, y cuando los analizas
juntos... es un espectáculo. La final de Milán y la de Vigo reflejan lo que ha
sido el año, con tres parejas brutales. En definitiva, decidan lo que decidan,
bien estará, quizás necesitan un desafío individual de cada uno, puede ser una
motivación extra el ver cómo puedes hacerlo con otro compañero. Hagan lo que
hagan estoy tranquilo porque seguirán jugando.
P. Esta semana se acaba la temporada, acaba también World
Padel Tour y en 2024 ya entra en escena Premier Padel como único circuito en el
que estarán. ¿Debe ser un año de transición o de consolidación? Todas las
miradas irán ahí.
R. Si no exigimos al circuito nos equivocaríamos, sea
World Padel Tour o Premier Padel. Y ellos también nos exigirán a nosotros, claro.
Yo no veo el 2024 como consolidación, creo que hay que ir construyendo el
futuro del pádel, y de primeras creo que es bueno que haya un solo ránking y
que no haya dos circuitos. Ahora se van a ordenar las cosas y creo que es bueno
para todos, jugadores y aficionados, y creo que el año estará bien, aunque las
mejoras grandes pienso que llegarán en 2025, será espectacular. Si el año que
viene va en su cauce, en dos años entrarán muchas más marcas y habrá una gran
mejora.
Quizás Lebrón y Galán necesiten una motivación de empezar
proyectos separados tras haber sido números 1 tres años, eso es un gran desafío
individual
P. ¿Qué flecos faltan para que rubriquen sus firmas con
Premier Padel?
R. Nos dijeron que el calendario se anunciará tras el
Master Final de World Padel Tour. Aún quedan algunas cositas porque la compra
se hizo en septiembre-octubre, hemos ido adelantando puntos pero todo está
supeditado a que salga todo bien y se complete el proceso de compra. Nosotros
teníamos claro desde el principio que si nos quejábamos de la exclusividad con
WPT, ahora queremos dejar todo claro para que el jugador sepa que pueda tener
otros compromisos pero que debe también cumplir con el circuito. Hay que darle también a Premier la
tranquilidad de que vamos a jugar sus pruebas, pero en las semanas en las que
no hay torneo y tienes algo que no te coincida con un torneo de Premier y
cuides al promotor, puedas ir a jugarlo y ya está. Hemos conseguido un montón
de cosas pero hay que dejar todo bien atado.
Fuente: Marca