LPF: “Batacazo blanco”

Milagrosa, épica, con olor a hazaña, increíble, podrían ser algunos de los títulos para una victoria inobjetable de Unión de Curarú en el Alberto Irigoyen. El albo dio una de las notas de la fecha y le ganó en su propia cancha, a unos de los candidatos, al único invicto del torneo y, además de todos estos condimentos, le ganó con dos hombres menos.

Unión que viene siendo un equipo de menor a mayor, ganó un partido bravo y que lo sigue manteniendo hasta ahora, en zona de Petit.

Marcos Sánchez en la parte inicial, de tiro penal, abrió la cuenta para la visita, y en el final del complemento, Daniel Frankemberger y Marcelino Calzacorta en su propia valla, decoraron el triunfo final para los blancos de Curarú.

PRIMERA PARTE, VICTORIA MÍNIMA DE UNION
Con realidades distintas llegaban ambos equipos. Con Defensores en la cúspide e intentando sacar más ventaja con sus inmediatos perseguidores. En cambio Unión, en zona de Petit, desde la semana pasada, y tratando de revalidar lo hecho en los últimos partidos, para seguir metido en la zona de clasificación.

Los primeros minutos encontraron un partido donde ambos intentaron apoderarse de la parte media. Con esquemas similares desde lo táctico, tanto Defensores y Unión intentaron buscar con sus armas más reconfortantes. La primera llegada de peligro fue para Defensores, a los 8', Calzacorta ejecutó un tiro de esquina desde la izquierda, Calandria calculó mal en la salida, Tallarico apareció solo y sin marca para poner la pelota al corazón del área, y Tobal que entraba por el medio no llegó para empujar la pelota.

Unión respondió dos minutos después, cuando Frankemberger, solo entrando por el sector derecho, tuvo tiempo y espacio, para sacar un remate con total libertad, pero su disparo se fue pegado al hierro derecho. El encuentro que seguía encendido, a los 12', Tallarico recibió en el círculo medio, apiló, y fue esquivando todo jugador que se le cruzó por el camino, y cuando llegó a pisar el área grande, sacó un zurdazo débil, que murió en manos de Calandria. A partir del primer cuarto de hora, el pleito, que por momentos se encendía, se empezó a apagar a medida que los minutos pasaban. Defensores no encontraba su juego en la elaboración de sus armadores y tanto Mayoz como Tallarico quedaban demasiado aislados y eran absorbidos por un fondo visitante, que estaba bien concentrado y que no tenía grietas.

Unión apostaba al juego de Frankemberger y a la peligrosidad latente de Sánchez, que era una luz de alerta para el fondo local, cada vez, que se apoderaba de la pelota. Mucha marca, fricción, se empezaban a devorar a un partido, que daba la impresión que podía armarse, pero que moría en el intento. Calzacorta, a los 20', sacó un derechazo a media altura, después de una desatención en el fondo y su remate fue controlado por Calandria, que mandó la bola al córner. El pleito se jugaba en la parte media, donde ambos no tenían ideas claras en los metros finales, eran cautos a la hora de llegar a los arcos y muy timoratos.

Lucha, entre cortado, combativo y con esporádicas llegadas, así, marcaban el rumbo de un partido mediocre. A los 36', Cardozo saltó con su codo y le pegó en el rostro a Calzacorta, Denk, cerca, le mostró la tarjeta roja directa y así, la visita se quedó con un jugador menos. Daba la impresión que el partido quedaba acorde para Defensores y que no sería la mejor tarde para Unión, pero nada de esto pasaría. A los 40', Defensores retrocedió mal en defensa, un pelotazo largo encontró a Sánchez con dos defensores.

El delantero se las aguantó para pelear la pelota, apoderarse de la misma y cuando pisó el área, llegó la pierna de Bernieri contra el nueve blanco, lo que determinó la pena máxima para la visita. Sánchez, con un toque sutil, puso las cosas uno a cero para Unión. Antes de que se fuera esta parte, Tallarico en sus pies tuvo un tiro libre cerca del área, que Calandria, con los puños, despejo el peligro.

LA PARTE FINAL, UNIÓN SE QUEDA CON LA VICTORIA Y EL INVICTO DE “DEFE”.
Con la desventaja, Alejandro Galeano puso a Rivas por Diego Galeano, para apostar en “Javito” más generación y elaboración en el juego, para poder alimentar a Mayoz y Tallarico, con un Unión, que se recostó demasiado atrás, sabiendo los problemas que eso, le podía ocasionar.

En los minutos iniciales, el patrimonio de la pelota fue del local, pero a pesar de esto, carecía de ideas, a la hora de poder generar peligro en el arco de Calandria. Defensores que era el apoderado de la pelota, ensayó con remates desde afuera, y Mayoz, a los 10', con un remate rastrero, encontró la resistencia de Calandria. El partido tendría otro quiebre, a los 15', cuando Rodríguez cometió una dura falta contra con Calzacorta y vio la tarjeta roja directa.

Panorama poco alentador para la visita, sabiendo, que debía sortear más de media hora de juego con dos hombres menos, y panorama más que alentador para Defensores, que se le abrían los caminos para poder alcanzar la igualdad y también poder dar vuelta la historia. Rivas después de varios rebotes, sacó un disparo, desde afuera a los 17', pero su remate salió pegado al hierro derecho.

La desventaja numérica tuvo la siguiente lectura, Unión se abroqueló y atrincheró en el fondo, sin descuidarse en ningún momento. En cambio Defensores, intentó desde algún arresto individual, fue vertical, careció de ideas y nunca estuvo claro en los pases finales. Con Guagliarello y Gastón Mecadán, Defensores buscó tener mas posesión con la pelota y un delantero más.

Pero, igual la tónica del local siguió por los mismos carriles, impreciso y errático, fueron los adjetivos que marcaron el rumbo de un equipo, que a medida que pasaban los minutos, no encontraba la manera necesaria para poder llegar a inquietar a una línea de fondo, que tenía una tarea intachable. A los 35', Gastón Mecadán le quedó una pelota sobre la banda derecha, y su remate se fue pegado al ángulo derecho de Calandria, que nada podía hacer.

Pero, a los 42', llegó el gran balde de agua fría. Después de un largo pelotazo, González ganó por la izquierda, cambió para Sánchez, que de primera tocó para Frankemberger, que con total libertad, sacó un temible zurdazo, que estremeció la red de Tolosa, que nada pudo hacer y así desató todo el delirio del pueblo de Unión.

Con un Defensores descompensado en todas las líneas, dos minutos más tarde, otra salida rápida por la izquierda, encontró de una pelota al área a Calzacorta, que con el afán de rechazar no hizo más que mandar la pelota al fondo de la red, ante el asombro de propios y extraños. Victoria clave de Unión, que dejó sin invicto a Defensores y que ganó un partido muy complicado, sobre todo, porque jugó con dos hombres menos, ante un rival, de mucho tamaño. Defensores, nunca encontró su juego y careció de ideas, para poder generar juego para sus hombres claves en ofensiva.

Fuente: Diario Noticias